La mejor información sobre el embarazo, el parto y los primeros años de vida de tu bebé

Embarazo: ¿Por qué me agito tanto?

Es una de las quejas más frecuentes durante el embarazo en cuanto a su calidad de vida: ¿Por qué me agito tanto? ¿A qué llamamos agitación? A la necesidad de respirar mayor cantidad de veces cuando hacemos algún esfuerzo. Vale destacar que, en cierta forma, el embarazo es un esfuerzo considerable, que incluso va en aumento a medida que pasan los días y los meses.

Pero, ¿a qué se debe? La cantidad de veces que respiramos por minuto guarda relación con el esfuerzo que realizamos y con la capacidad pulmonar que tenemos para satisfacer la demanda de oxígeno (no solo de los músculos, sino también de los sistemas que “trabajan” aun sin esfuerzo, como la digestión y el ritmo cardíaco). Durante la gestación, el útero -en constante crecimiento- aumenta la presión abdominal, “empuja” los músculos del diafragma hacia arriba, y eso hace que la capacidad de la caja torácica sea menor. En consecuencia, a partir del segundo trimestre, la respiración de la embarazada será más frecuente que antes. Eso significa que si una mujer normalmente respira de 10 a 12 veces por minuto, a medida que el útero se vaya agrandando precisará 2, 3 o 4 respiraciones más cada minuto para compensar las necesidades de oxígeno.

No hay que asustarse, es normal y le pasa a todas las futuras mamás. Por supuesto, la intensidad y la frecuencia de los episodios dependerá del tipo de actividad que realice, ya que obviamente no es lo mismo quedarse la mayor parte del tiempo sentada que estar en constante movimiento, o haciendo tareas que requieren cierto esfuerzo físico.

A medida que el útero aumenta de tamaño se requieren 2, 3 o 4 respiraciones más por minuto, para compensar las necesidades de oxígeno.

Cuestión de peso

Y los kilos, ¿qué papel juegan? El exceso siempre pasa factura, de modo que una mamá con sobrepeso se sentirá más agitada que otra que va aumentando dentro de los parámetros considerados normales. Sin embargo, aun en los casos en que el incremento es “normal”, la cantidad de kilos acumulados no suele ser menor a 10 o 12. Si traducimos ese peso, por ejemplo, en manzanas, un kilo equivale aproximadamente a 4 unidades. Entonces, si aumentás 10 kilos, tu cuerpo estará transportando alrededor de 40 manzanas, que cargarás cuando caminás, mientras trabajás, al subir escaleras, e incluso cuando dormís y mientras respirás. Si el aumento de peso es de 15 kilos, las manzanas que deberás cargar serán nada más y nada menos que 60. Y lo cierto es que nadie saldría de una frutería cargando más de 2 o 3 kilos de manzanas.

¿Te falta el aire?

Es normal que a comienzos del tercer trimestre te sientas aún más agitada, y las razones son más de una:

  • Tu peso: a esta altura, el incremento estará rondando los 10 kilos.
  • El aumento del volumen de sangre normalmente es de 4 litros, pero en este momento alcanza los 6 litros.
  • La elevación del diafragma debido al aumento de tamaño del útero.
  • La demanda de oxígeno de tu bebé (¡que ya pesa 2 kilos o más!), y de la placenta, que tiene un tamaño considerable.

Luego, hacia el final del embarazo, cuando el bebé “baje” y se encaje en el canal de parto, la sensación disminuirá.
Por supuesto que si notás algún otro síntoma que te preocupe -como sensación de ahogo, palpitaciones o dolor en el pecho- consultá enseguida al médico. Pero si no, tené paciencia y no te asustes: se trata de una de las típicas molestias de la dulce espera, que así como vino, desaparecerá.

Por qué me agito tanto?

Tips anti-agitación

  • Controlá tu peso: procurá no aumentar más de lo recomendable.
  • Realizá una actividad física aeróbica apropiada para esta etapa: los ejercicios aeróbicos favorecen la oxigenación de todo el organismo, y contribuyen a que el intercambio de oxígeno entre inspiraciones y expiraciones resulte eficaz.
  • Alimentate en forma adecuada: llevá una dieta liviana y reemplazá las comidas copiosas por varias colaciones al día.
  • No fumes, no consumas drogas y evitá las bebidas alcohólicas.

Con el asesoramiento de Dr. Mario Sebastiani – Médico Obstetra
Todos los derechos reservados a Ahora Mamá ® 2020

También podría gustarte

Dejá una respuesta