¿Cómo hablar del coronavirus con los niños pequeños?
Los niños tienen un conocimiento previo de lo que está ocurriendo con el coronavirus: las clases han sido canceladas, y además ven y escuchan lo que los medios de comunicación informan día a día. ¿Cómo les explicamos el fenómeno sin sembrarles temor? Lo recomendable es explicar a los niños que hay un virus (llamado coronavirus) que podría llegar a ser contagioso, pero que no a todos puede enfermarnos. Para protegernos entre todos, se decidió que nos quedemos en casa, así el coronavirus no sigue encontrando personas a quienes infectar. También porque hay gente que -tal vez sin quererlo o sin saberlo- puede tener el virus y nos lo puede transmitir. Lo fundamental es dejarles en claro que lo que puede suceder es algo así como una gripe, con resfrío y fiebre.
Además debemos explicar a los niños que el coronavirus va saltando de una persona a la otra y en muchos países están con varias complicaciones para frenarlo. Por eso, y de acuerdo a los consejos de los especialistas, se dispuso que lo mejor es quedarse en casa. Cuando alguien infectado se queda en su casa, se logra que el coronavirus no se transmita a otras personas, y de esa manera estamos encerrándolo y debilitando. En este sentido, la cuarentena es para que los “bichos” no anden libremente para todos lados. La idea es explicarlo en un lenguaje sencillo y lúdico, que no genere temor. No estamos hablando de restringir una enfermedad, sino que son pequeños “bichos” que están circulando entre todos, lo que queremos hacer es que queden limitados, que terminen desapareciendo y no se repliquen en otra persona.
¿Cómo transmitir un mensaje positivo en medio del caos que observan los chicos a su alrededor?
La recomendación es desdramatizar con los niños con el tema del coronavirus. A veces estas cosas suceden y está bueno que nos cuidemos. La idea es que se le dé una mirada positiva: “qué bueno que vamos a aprovechar este momento para estar juntos, para estar mirando tele juntos, o jugar juegos de mesa”. Aprovechar para hacer todas esas cosas que uno nunca tiene tiempo porque siempre está apurado. Los niños pueden vivenciarlo más como una ganancia que como una pérdida. Es una buena oportunidad para leer, pintar, hacer collages, maquetas u otras actividades juntos.
¿Cómo influye la edad de los chicos en el abordaje del tema? ¿Cuánta información está mentalmente preparados para recibir?
La desinformación aumenta los miedos y dispara fantasías. Es importante responder las dudas que los niños plantean. Hoy ya todos los niños saben del tema, y lo mejor es informarlos. El objetivo es ayudar a que los niños se sientan informados y tengan datos basados en la realidad cientifica, que seguramente serán más tranquilizadores que lo que les cuentan sus amigos o escuchan en las noticias.
Tampoco es bueno dar demasiada información, ya que esto puede ser abrumador para los niños, pero sí hay que responder las preguntas, en la forma más clara y honesta posible, y acorde a la edad. Puede ocurrir que no tengas necesariamente todas las respuestas, pero lo lo importante es estar disponible para escuchar al niño.
La idea es hablar del tema con los chicos en un lenguaje sencillo y lúdico, que no genere temor.
¿Es recomendable pensar en posibles juegos para promover la higiene como por ejemplo canciones?
Toda canción o historia que se use para estimular el lavado de manos es útil, debemos además enseñar con el ejemplo y acompañarlos en el lavado de manos, donde gana quien invierte mas tiempo en el lavado (y no menos como sería una competencia habitual).
Recordale a los chicos que, para cuidarse, deben lavarse las manos con agua y jabón durante 20 segundos (lo que equivale a cantar el “Feliz cumpleaños” dos veces) cuando regresan de la calle, antes de comer y después de sonarse la nariz, toser, estornudar, así como antes y despues de ir al baño.
¿Cómo abordar la suspensión de clases y todo lo que eso conlleva, como por ejemplo estar alejado de sus amigos?
Lo aconsejable es realizar actividades con los niños, todo eso que en la vida diaria no tenemos tiempo para hacer. Sería muy interesante hacer una lista que proponga distintas actividades para realizar. Se debe vivir esto con naturalidad, ya que la cuarentena no es eterna. Lo peor que podemos hacer es vivirlo desde un lugar de sufrimiento o angustia. Sería útil que los chicos hagan sus tareas escolares mientras sus padres trabajan desde casa, tal vez en la misma mesa, en la cocina juntos o cada uno de un lado del escritorio, pero todos van a estar trabajando durante un tiempo determinado. Y una vez finalizadas las obligaciones, hay una gran variedad de cosas que pueden hacerse con los hijos, que generalmente no se realizan por falta de tiempo. Convengamos que somos una sociedad de padres ocupados, por lo cual sería fantástico que usemos los días de cuarentena para disfrutar de aquellos momentos hogareños con actividades que uno no está acostumbrado a realizar.
¿Cómo evitar que nuestra comunicación corporal nos delate y muestre signos de ansiedad mientras intentamos calmarlos?
La ansiedad es una manera de respuesta lógica al miedo y a lo desconocido; si hablamos sobre los cuidados y sobre datos reales, esto no debería suceder.
Pero es vital también, mostrarles que si bien las salidas al shopping, las fiestas de cumpleaños, o las actividades deportivas en el club se han cancelado, ellos seguirán teniendo rutinas en casa, en la gran mayoría de los casos comerán con los papás al mediodía, y su escuela y actividades estarán esperándolos en el mismo lugar de siempre. Es importante no magnificar ni generar un panorama terrorífico hacia el futuro.
¿Es un buen momento para hablarles sobre los miedos en general (miedo a la oscuridad, a la muerte, al encierro)?
La verdad que no es el momento para ampliar el universo de temores; si no surgen, es ideal hablar sobre lo que se presenta y no magnificar.
Asesoró: Dra. Andrea Abadi, Psiquiatra Infanto Juvenil y Directora del Depto. Infanto Juvenil INECO
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