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Cómo proteger a tu bebé del sol

La piel de los bebés es sumamente fina y sensible. Por lo tanto, sea en la ciudad, en el campo, en la playa o en la montaña, tiene que estar muy bien protegida. Es imprescindible que los cuidados se pongan en práctica desde la más tierna infancia, porque la radiación ultravioleta provoca un daño acumulativo e irreversible, y sus consecuencias irreparables se pagan con el tiempo. Entonces, es fundamental proteger a tu bebé del sol con un buen protector solar. ¿Cuál elegir? A la hora de comprar, es fundamental elegir productos de primera calidad, y especialmente pensados para bebés, y de marcas reconocidas y confiables. 

Consejitos:

  • Siempre que tu hijo esté al aire libre, protégelo del sol con una pantalla solar de amplio espectro UVA-UVB, resistente al agua. 
  • No exponerlo al sol en forma directa. Aun cuando esté bajo la sombrilla o adentro de la carpa, aplicarle un protector solar con FPS no menor a 50, porque los rayos UV le llegan igual.
  • Colocarle el protector solar como mínimo 30 minutos antes de exponerlo al sol. Así la piel podrá absorberlo y el producto penetrará en las capas cutáneas más profundas.
  • Cuando coloques el protector, no olvides distribuirlo también en las orejas, el dorso de los pies y de las manos, el cuello y la nuca.
  • Durante el día, renovar la aplicación cada 2 horas, y después de salir del mar o la pileta (aunque el producto sea “resistente al agua”).
  • Utilizar protección solar aunque esté nublado: los rayos UV atraviesan la capa de nubes y llegan igualmente a la piel. 
  • Colocarle un gorrito y una remerita, preferentemente de colores claros. En la actualidad existe ropa fabricadas con telas que cuentan con protección solar. 
  • Incluso con la protección apropiada, tu bebé no debe permanecer al sol directo más de 15 minutos, y siempre dentro de los horarios seguros (antes de las 11 de la mañana y después de las 4 de la tarde). No lo olvides: las horas del mediodía están prohibidas.

Repelente + Protector solar 

Cuando tu hijo está al aire libre, tenés que defenderlo tanto del sol como de los insectos. Por lo tanto, es preciso aplicarle dos productos en forma simultánea: repelente y protector solar. No temas, no hay problema en que le pongas ambos al mismo tiempo. Ahora bien, ¿por cuál empezar? Colocarle primero la pantalla solar, media hora antes de que tu pequeño salga al aire libre (ese es el tiempo que demora el producto en absorberse). Pasados 30 minutos, cuando el protector ya penetró, aplicar el repelente. Nunca lo hagas al revés, dado que el repelente pierde efectividad si se aplica antes del protector solar.

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